Venuto al mondo es el título original de esta película italiana que ocupaba lugar en mi lista de pendientes desde hacía ya algunos años. En el reparto tenemos a Penélope Cruz que, como en toda su filmografía, me gusta a ratos sí y a ratos no. Y también a Emile Hirsch, que pese a repetir el look de mi adorada Into the wild, no pude evitar confudir con Daniel Brühl.
La historia es un continuo viaje entre el presente y el pasado, a veces algo inconcluso pero con un resultado bastante vistoso. La Guerra de los Balcanes aparece como hilo conductor de la película, suena de fondo y trae eventos a la vida de los protagonistas, Gemma y Diego, que luchan su propia batalla en el campo del amor y la culpa.
Sin haber leído el libro, "La palabra más bella" de Margaret Mazzantini, en el cual se basa la película, puedo entender que todo lo que aparece de forma confusa en ella es quizá parte de una historia más compleja a la que ya de por sí el extenso largometraje no podía dar cabida. El final, desde luego, es de redención, lo suficientemente bueno para que nosotros también perdonemos esa falta de información y la entendamos como invitación a leer la novela.
Pese a las malas críticas que acompañaron el estreno de esta película en España, os recomiendo dadle una oportunidad.
Pese a las malas críticas que acompañaron el estreno de esta película en España, os recomiendo dadle una oportunidad.
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